Ciencia y Tecnología

El desarrollo de un país tiene que ver con la capacidad educativa que tienen los educadores para dar, como también la de los estudiantes para recibir conocimiento y que este se invierta en proyectos científicos y tecnológicos que hagan florecer empresas nacionales cuyas ganancias sean un gran soporte económico, que a su vez permita el planeamiento y la inversión en proyectos tecnológicos innovadores en las diversas áreas de la investigación.

Este desarrollo se torna en la actualidad imposible debido a la enorme cantidad de recursos que se gastan en la compra de armamentos, en el mantenimiento de estos y sobre todo en la perpetuación de la institución militar, cuya necesidad se ve enfrascada en muchas personas debido a un enfoque demasiado parcializado en vez de observar todo lo que vendría a ser un plan integral que permita encontrar un camino hacia la verdadera pacificación interna y externa del país.

La decisión de encarar el futuro de forma correcta le pertenece al gobierno, puesto que serán aquellas decisiones políticas las que pongan en marcha la construcción de una cultura superior en todo el Perú, empapada de ciencia y tecnología revolucionaria que le permita ver a cada ciudadano sus expectativas expandidas en un mundo sin límites ni barreras para el desarrollo.

Necesidad de seguridad

Existe un problema vital que se esta abordando de una manera equivocada, para todos es una preocupación constante el tema de la seguridad ciudadana, siendo aquel un eje central en los discursos de los candidatos presidenciales en las que no faltan amenazas de guerra contra la delincuencia, y entonces hablan de mayor contingente policial, elaborar y ampliar cárceles, etc. Se está enviando un mensaje erróneo a la población, dividiéndonos en “Buenos y Malos”, siendo estos últimos responsables de la delincuencia.

Todo es cuestión de perspectivas, por lo tanto debemos empezar a ponernos en el lugar del otro para así comprender el por qué ocurren las cosas que vemos a diario en las noticias, todos nacemos con los mismos potenciales pero es el contexto de cada vida la que nos hace ser diferentes, y en el caso de la gente sin recursos económicos que son el sustento de la vida actual, aquella vida se vuelve una lucha perpetua para sobrevivir cueste lo que cueste.

Debemos entender que siempre hay una razón para todo, el peor ciego es aquel que no quiere ver, y es el gobierno quién no desea ver que aquellas muestras de “delincuencia” son un pedido de ayuda urgente, debe devolvérseles la esperanza con hechos concretos más no con palabras y datos económicos que únicamente sirven como boletines informativos desprovistos de un verdadero trabajo en equipo necesario para resolver el problema.

Vía educativa

Los niños son el sendero de nuestro país ya que aquello que se les inculque, tanto en casa como en las instituciones educativas, repercutirá drásticamente en lo que vayan a hacer en el futuro; Esta época de cambios requieren de una visión fresca que determine la forma correcta de educar a los niños, para ir destruyendo las barreras que determinan la buena, mala y pésima educación en el país.

Establecer las bases educativas es un rol importantísimo que debe ser bien llevada y con la mayor asesoria posible, puesto que un error en ello podría llevarnos a un abismo de ignorancia perpetua. La municipalización de la educación es un grave error debido a que les darán libre albedrío de instaurar programas educativos diferenciados que contribuirá únicamente al resquebrajamiento de nuestra juventud, aquellos requieren de una misma forma de abordar la educación, en ciertas municipalidades con un mayor énfasis, pero en general la forma educativa debe responder a una sola directiva educativa.

Existe un gran obstáculo para la educación, y en general para la vida misma, la pobreza es un estado frustrante que impide realizarse a las personas, el gobierno cree que con los colegios estatales se hace mucho por la educación, pero cómo se puede alimentar bien el cerebro sino se alimenta bien el cuerpo; es esencial una nueva planificación que integre todos los problemas existentes puesto que siempre existen relaciones entre ellos, de ahí las decisiones que se tomen podrán dar forma a la solución perfecta que resuelva todos los problemas.

Mejorar el Perú

Es una constante ver al Presidente de la república en cada acto público que se ofrece, sobre todo en las concernientes a obras realizadas por el gobierno para lo cuál el presidente viaja, reflejando una vida atareadísima con una serie de responsabilidades impostergables a las cuáles se somete con pizcas de estoicismo, es decir, todo sea por el Perú. ¿Cuál es realmente la verdadera labor del presidente?, es acaso necesario verlo junto a los ministros quienes, al ser designados por el mismo presidente, tienen la suficiente autonomía para inaugurar y/o celebrar cualquier evento concerniente a sus respectivas carteras sin la necesidad de la presencia presidencial.

Tenemos que tener en cuenta que existen los llamados protocolos y el famoso “figuretismo”, veremos que así como los protocolos fueron creados, también pueden ser cambiados, por tanto no existe excusa que obligue al presidente a hacer dichos viajes; la política es un medio para servir al país, más no para figurar y volverse famoso, además es necesario que la gente conozca más de sus ministros en vez de verse eclipsados por la presencia del presidente, quien acapara toda la atención y se lleva el crédito de un buen trabajo que tuvo muchos colaboradores.

Por supuesto que es necesario que el presidente viaje por el Perú, que vea el desarrollo y aquello a lo cuál le falta un impulso, que en aquellas ocasiones decida conversar y develar las necesidades de cada pueblo que visite, que no solamente que lleve un monólogo propagandista, que se convierta el presidente en un altavoz que recoja el pedido de las personas por las cuales gobierna; hecho todo eso el presidente podrá comenzar a hacer su verdadera labor: Mejorar el Perú.